Alarmas para casa y hogar a exámen (España):

El 16,4% de los españoles ha sufrido un robo o intento de robo en su hogar. Según los datos, en nuestro país se produce de media un robo cada siete minutos.
Ante este riesgo, lo que ofrece mayor seguridad es la instalación de un sistema de alarma para su hogar o casa o un sistema antihurtos, cuyo precio oscila entre los 600 y los 80.000 euros, dependiendo de sus características y de si precisan o no instalación.

LOS MODELOS de alarmas para el hogar
Existen dos modelos principales de alarmas para el hogar.
El primer grupo incluye los sistemas más complejos, que están conectados con una central receptora de alarmas, mientras que el segundo grupo abarca los sistemas más simples, que están compuestos sólo de un sistema acústico y unos sensores.
Las alarmas del primer grupo son más seguras, al estar comunicadas con una central que, una vez comprobado el peligro, alerta a la policía. Su coste oscila entre los 3.000 y los 80.000 euros. Los sistemas se basan en distintos tipos de tecnología: sensores de movimientos, infrarrojos u ondas de radio. Se trata de alarmas bastante sofisticadas, cuya instalación precisa de conocimientos técnicos, por lo que se recomienda acudir a un profesional para el montaje.

Funcionamiento de las ALARMAS AUTOINSTALABLES PARA EL HOGAR:
El sistema de alarma simple es un método de seguridad mucho menos sofisticado y más barato. No lleva ninguna conexión externa. Se trata únicamente de un sistema acústico que tiene como objetivo ahuyentar a los intrusos mediante la activación de una sirena. La principal ventaja, a parte de su precio, es que la instalación es muy sencilla. No supone ningún tipo de complicación, por lo que puede llevarla a cabo el mismo usuario siguiendo el manual de instrucciones.

Detector de movimiento de la alarma de hogar
Entre las alarmas más simples y eficaces se encuentra el sistema detector de movimientos. En el momento en que la alarma detecta, a través de unos sensores magnéticos, la presencia de personas no autorizadas en la zona monitorizada, no sólo activa la alarma acústica, sino que alerta también al usuario mediante un mensaje de texto o una llamada a su teléfono móvil o fijo.
El detector de movimiento suele tener un alcance medio de unos cinco metros, pero los más modernos llegan hasta los diez. Para activar y desactivar la alarma hay que insertar un código se seguridad. Los sistemas más simples son muy baratos y tienen un coste inferior a los 40 euros.
Infrarrojos en la alarma de hogar
La alarma de seguridad más sencilla se compone de una central, un teclado, sensores y avisadores acústicos. En algunos casos, incluye también algún tipo de señalización visual, como balizas y flashes, para quien tenga problemas de audición o cuando exista un alto nivel de ruido en el ambiente. Los sensores suelen ser volumétricos, al detectar al intruso dentro de una estancia. La tecnología más fiable es la infrarroja, que basa su funcionamiento en el cambio de temperatura entre sus haces.